De todos los datos de los examinados en Cochabamba, solamente el 10 por ciento llega a realizar el tratamiento contra la enfermedad del Chagas, explica la médica Rosemary Grágeda, responsable departamental del Programa Chagas del Servicio Departamental de Salud (Sedes).
La especialista señala las siguientes causas: son personas mayores de 60 años, tienen enfermedades concomitantes y no cumplen el criterio para iniciar tratamiento, algunos ya lo iniciaron pero no lo terminan por las reacciones adversas, cambio de domicilio y accesibilidad al establecimiento de salud.
Grágeda apunta además que, en Cochabamba, la mayor zona de riesgo sigue siendo el cono sur, con índices por encima del 3 por ciento.
La especialista asegura que si bien los laboratorios han mejorado en cuanto al equipamiento, no existen muchas empresas que producen el medicamento.
“La debilidad está en el envío de insumos desde el programa nacional, que lo compra a través de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Organización Panamericana de la Salud (OPS), que manda a las regionales, pero no en las cantidades necesarias”, asegura.
Recomienda que haya un mejor seguimiento del personal de salud, ya que el medicamento podría ser aprovechado por otros pacientes.
Indica que, a la fecha, la población con mayor cantidad de examinados es la de mayores de 15 años; como programa realizan atención exclusiva y prioritaria a este segmento.
“A mayor cantidad de pacientes examinados, menor la cantidad de pacientes positivos y la prevalencia disminuye”, resalta la experta.
Una de las acciones inmediatas como programa es medir el impacto y rescatar la prevalencia en el grupo de uno a cinco años.
La especialista resalta que, con la implementación del Sistema único de Salud (SUS), están solicitando que los afectados puedan tener atención en tercer nivel, que implementen las prestaciones necesarias y de forma gratuita, además de la implantación de marcapasos.
Grágeda resalta que la mejor forma de prevención es realizar la denuncia ante la presencia del vector en los domicilios; también mejorar las viviendas, teniendo cuidado con la limpieza y evitar la crianza de animales domésticos que son posibles huéspedes.
“Es necesario romper el silencio. Que la enfermedad reciba la atención necesaria de todos. Que disminuya la presencia del vector y, por ende, el riesgo de transmisión”, enfatiza Grágeda.
El trabajo de una red interinstitucional
Para luchar contra el Chagas trabajan en red institucional el programa Chagas del Sedes, Ceades, Obades, ADIO, Famisal, MAB Internacional y la Asociación de pacientes Corazones Unidos por el Chagas.
Los pilares de la fundación Ceades son la investigación, educación, información y capacitación. Resaltan de ésta las plataformas de para la atención de pacientes adultos con Chagas. Son cuatro en Cochabamba, una en Tarija y otra en Sucre.
En las plataformas se realiza el diagnóstico, tratamiento y seguimiento.
Ruth Saravia, gestora de la Red de Chagas Cochabamba, explica que en dichas plataformas, de 2015 a 2018, han captado 8.466 pacientes positivos, de los cuales 4.682 han iniciado el tratamiento en los centros de la plataforma. “Gracias al seguimiento, el éxito del tratamiento es de más del 80 por ciento”, subraya.
La ONG Obades trabaja en el mejoramiento de viviendas en comunidades campesinas de los municipios Aiquile y Mizque. Uno de sus miembros, Jaime Pardo, explica que el yeso y cemento son fundamentales para evitar la proliferación de la vinchuca en la vivienda.
Por su parte, la representante de la Asociación de Pacientes Corazones Unidos por el Chagas, Ana María Terrazas, añade que uno de los principales desafíos es que los pacientes lleguen a los centros de salud.
Hoy, 14 de abril, se celebra el Día Mundial del Chagas, oportunidad que abre una puerta de sensibilización en todo el mundo sobre esta enfermedad desentendida por más de un siglo.